sábado, 30 de noviembre de 2013

No olvidemos nunca




El fusilamiento de los ocho estudiantes de Medicina.

Palabras de Eusebio Leal pronunciadas el 27 de noviembre, en la acera del Louvre, durante el acto conmemorativo por el Fusilamiento de los ocho estudiantes de Medicina.

Buenos días a todos:

Primero quisiera, antes de conmemorar esta solemnidad cubana y estudiantil, hacer una breve explicación que permita interpretar el sentido de este acto.
Este acto se organiza por primera vez a finales del año 1936 y nace en medio de una batalla que había conmovido al mundo: la batalla por la República Española, que había concluido con el alzamiento de un grupo de militares que representaban la reacción contra los valores que la República política, cultural y moralmente representaba España.
Convocados por este acontecimiento, el Partido Comunista de Cuba y otras fuerzas progresistas, unidas al Partido, pidieron un voluntariado para ir a luchar por lo que se debatía en España. Había la percepción de que se luchaba por algo más que por la República. Era como el primer capítulo de una batalla mucho más dura que se libraría a partir del año 1939, cuando la invasión a Polonia provoca y determina el comienzo de la Segunda Guerra Mundial, el enfrentamiento entre el fascismo, el nazifascismo y las fuerzas democráticas que se oponían a él.
El Historiador de la Ciudad, maestro mío y predecesor, el Dr. Emilio Roig de Leuchsenring, profundamente republicano, amigo de los republicanos y compañero de muchos de los jóvenes que fueron a luchar por España, organizó este acto y para organizarlo escogió esta fecha: el 27 de noviembre.
¿Y por qué la escogió?: Se escoge el 27 de noviembre porque es el acontecimiento más dramático que ocurre en ese período. Cuando se estudia la histórica Guerra de los Diez Años, veremos que, una vez comenzado ese conflicto, ocurrieron en La Habana y en otros lugares de Cuba, fundamentalmente en los territorios insurreccionados que iban desde el Oriente hasta la frontera de Las Villas, no solamente víctimas o mártires como consecuencia del enfrentamiento brutal entre ambas fuerzas, sino crímenes políticos que, desencadenadas esas fuerzas por la reacción, cometieron muchas veces terribles abusos contra personas inocentes y no culpables o personas que solamente tenían como delito probado su amor o su confesión de amor a una nación, Cuba, que debía alcanzar el status de serlo.
No olvidemos que el propio José Martí, que estudiaba y vivía cerca de aquí, escribió un bello poema, saludando el comienzo de la lucha por la independencia, un poema que él tituló Diez de Octubre.
En medio de esos acontecimientos, al no lograrse rápidamente la victoria cubana, la guerra se hizo más terrible y más depredadora. Si el año 69, en que se proclama la Constitución de Guáimaro, en que se proclama a Céspedes como primer Presidente de la República, fue un año duro, el 70 fue un año terrible y el 71 un año devastador. Ya se sabía que no había posibilidad alguna de refugiarse en un espacio de neutralidad. El propio gobernante español de turno, el Capitán General Conde de Balmaseda, en 1871, le había dicho a una reunión de notables cubanos que “el que no está conmigo, está contra mí”. Era una línea divisoria.
En el seno de la Universidad, donde siempre reina una inquietud por ideas y una inquietud generacional, los jóvenes hicieron varios actos de desobediencia en distintos momentos. Pero, en noviembre de 1871, ocurrieron una serie de sucesos que terminan con una provocación que no conoció límites.
El elemento desencadenante del drama fue la muerte en La Florida, en Tampa, de un periodista integrista,esto quiere decir que defendía irracionalmente los derechos coloniales sobre Cuba, incluyendo alusiones a la familia, a los hombres, a la mujer y eso provocó que allí, adonde fue, preparado para un duelo regular, quiso batirse con un periodista cubano o con algunos cubanos que se encontraban ya en el exilio, y se produjo un incidente en las afueras del hotel donde se encontraba y resultó muerto Gonzalo de Castañón.
Al regresar a La Habana, su cadáver embalsamado fue enterrado en el antiguo Cementerio de Espada, y allí, con grandes honores, los voluntarios que eran los empleados de los almacenes, los servidores de los principales dueños y propietarios de capitales en la capital -valga la redundancia: capital económico y también capital agrario-, habían convocado a sus empleados y los habían armado, pagando ellos mismos su armamento y con la tolerancia y el apoyo del poder político fueron uniformados y regulados para luchar y contener en la ciudad cualquier acto de desorden.
Todavía hoy, cuando ya los nombres no significan nada, aparecen en algunos lugares nombres que ya son imborrables, pero yo me veo en la necesidad de recordar. Nosotros entramos ahí enfrentre, cómodamente, al cine Payret; sin embargo, Joaquín Payret era uno de los coroneles de uno de los Batallones de voluntarios. Nosotros caminamos por la calle Zulueta; Don Julián de Zulueta era Coronel de otro cuerpo de voluntarios y así sucesivamente.
De esta manera, los cinco batallones más importantes, con sus coroneles, estuvieron presentes seguramente en las exequias de Castañón; y La Habana estaba en un estado de crispación cuando una mañana se corrió en los círculos, en los cafés, que la tumba de Gonzalo de Castañón, en el viejo cementerio, había sido profanada, roto el cristal y profanado el sepulcro.
¿A quién se atribuyó eso? Se atribuyó a los estudiantes de Medicina, que solían realizar cerca de allí, donde existía un área para hacer las prácticas pro forenses propias del primero y segundo años; en aquel lugar habían estado los estudiantes y se dice que algunos de ellos, en el ya cementerio cuidado solamente por un celador, habían estado arrancando una flor o haciendo uno que otro comentario o burla. Pero lo que se dijo fue, no esto, que ya habría sido suficiente para una baraja, sino que la tumba había sido profanada. Inmediatamente se formó un molote muy grande que concluyó con la ida del jefe de la policía a la Universidad, en el corazón de La Habana Vieja, y entrar al aula para buscar a los alumnos y a conocer quiénes eran los que habían estado en el cementerio. Comoquiera que el profesor dijo que de su aula no podían sacar a ninguno, se fue a la otra y, ante la vacilación del profesor de aquella aula, se lleva a todos los alumnos de esta, presos, acusándolos de haber participado en aquel suceso.
El profesor que se negó, Domingo Fernández Cuba, está enterrado junto a los estudiantes en el panteón del Cementerio de Colón, como reconocimiento de Cuba a su integridad humana y profesional. Él dijo: “De aquí no sacan a ninguno”. El otro, débil, lo permitió. Y todos los estudiantes fueron llevados a la cárcel.
En medio de esta conmoción pública, el Capitán General estaba en el Oriente del país y en La Habana estaba su sustituto, que por su condición de haber nacido en Cuba, quiere decir, oficial de alto rango español pero criollo, era presionado para que demostrara de una manera pública su lealtad e incondicionalidad porque siempre había una secreta desconfianza hacia su fidelidad . Al menos eso demuestran los hechos. Y los voluntarios le exigen que tiene que haber un proceso y un acto de justicia.
La cárcel estaba al final de la calle Prado, donde todavía hoy la calle se llama Cárcel. Ahí estaban todos prisioneros. Se produce entonces la necesidad de seleccionar de aquel grupo, hicieron la práctica de escoger al azar y tomaron a ocho de los que estaban allí reunidos, sin la certeza de que habían estado o no en los actos del cementerio que se les atribuía.
Uno de ellos, demasiado joven, que estaba en el nivel más bajo de la edad para el ingreso en la Educación Superior, ni siquiera había estado en La Habana ese día. Estaba en su ciudad natal, en Matanzas.
Resultado: Se nombra un tribunal y comienza el juicio. Y en el tribunal tiene que nombrarse un abogado defensor de oficio y como era un Tribunal Militar, se escogió a un capitán del Ejército, no de los voluntarios, para la defensa de los estudiantes.
Aquel capitán se llamaba Federico Capdevila Miñano, eterna gratitud del estudiantado cubano y de Cuba a aquel español que durante el juicio defendió a los estudiantes valientemente ,y como había otros capitanes de voluntarios que estaban representando a la Fiscalía y al gobierno, terminan con ese juicio porque este no conducía necesariamente a la pena máxima que ningún código establecía ni siquiera para este delito.
Resultado: Un segundo juicio con otros oficiales voluntarios y hay, además, dos generales españoles de artillería, que se oponen al juicio, y esos dos generales, Clavijo y Benet, por haber protestado en nombre de las leyes militares son encarcelados por los voluntarios, que prácticamente han dado un golpe de estado en la capital y han asumido el poder.
Capdevila ha sido separado. Finalmente, ese tribunal determina que los ocho debían ser ejecutados el día 27, en horas de la mañana. Desde el balcón del Palacio de los Capitanes Generales, hoy Museo de la Ciudad, un voluntario leyó la sentencia, mientras que aquí, en el Parque de la Fraternidad, que era el Campo de Marte, se reunían más de diez mil hombres armados que reclamaban participar en el acto en el que iban a hacer justicia o a tomar venganza de los que habían profanado la tumba de Gonzalo Castañón.
De esa manera, el 27 de noviembre de 1871 fueron llevados a la Explanada de La Punta. Pero ahí no se fusilaba, porque no existían condiciones para poderlo hacer, allí se ajusticiaba con el garrote a los malhechores y a quienes cometían delitos políticos, como un acto de humillación. Una silla -los jóvenes no saben qué era un garrote- en que se colocaba al cuello una presilla metálica, otra pieza aquí y uno detrás daba vueltas provocando la ruptura inmediata de la vértebra: muerte inmediata.
Pero como no podían hacer un agarrotamiento para ocho, deciden que, enfrente, donde había unos depósitos de los ingenieros militares, entre las ventanas del depósito podían ser colocados de dos en dos los que iban a ser ejecutados. De esa manera, de dos en dos, fueron ejecutados aquella mañana.
Cuando eso estaba ocurriendo y las manifestaciones estaban produciéndose, aquí, en el hotel Inglaterra, donde nos encontramos y donde por largos años el hotel ha conservado el recuerdo de esos acontecimientos -están aquí su director y sus trabajadores- , un español nacido en las Islas Canarias -por eso la presencia aquí de la Sociedad Canaria y los descendientes de los canarios, que se enorgullecen de llevar el nombre de Leonor Pérez Cabrera, la madre de José Martí, nacida en las Islas Canarias-, un oficial joven que se encontraba aquí, como era su costumbre, llamado Nicolás Estévanez Murphy, se entera que se ha consumado el juicio y se va a producir la ejecución.
Según se dice, aquí en el portal y en presencia de varios amigos, protagoniza una escena de protesta, que se identifica en los militares con el acto de romper la espada, lo cual significa un acto de insubordinación y de rebeldía contra una injusticia. En realidad, Estévanez comentó después que él no supo lo que había hecho, que, encolerizado por aquel acto brutal, había protestado.
Los empleados del hotel, para evitar que fuese víctima también de lo que estaba ocurriendo, lo llevaron rápidamente al interior para calmarlo. Mientras, se escuchaban las detonaciones y las descargas de las ejecuciones. Cuando terminó el espectáculo y se calmaron las pasiones, los cuerpos fueron llevados en un carro y tirados fuera del cementerio en una fosa común, porque como criminales y profanadores no tenían derecho a un sepulcro cristiano. Tales fueron los acontecimientos.
Poco tiempo después, los demás estudiantes que estaban presos fueron indultados. Algunos de los que, como Fermín Valdés Domínguez, amigo de Martí -habían estudiado juntos muy cerca de aquí en el Colegio de Rafael María Mendive y solían pasear por esta famosa Acera del Louvre- son llevados fuera de Cuba en medio de medidas de protección, porque se planeaba una venganza contra los sobrevivientes.
Fermín escribió un libro formidable, elogiado por Martí, que se llamó 27 de noviembre, en el cual relata los acontecimientos. Pero lo más interesante, deteniéndonos un poco, es que la noche antes o la tarde antes de la ejecución, el jefe del pelotón de fusilamiento, que era un voluntario del quinto batallón, decide ir a ver a los estudiantes para conocerlos y saber en qué estado de ánimo, de arrepentimiento, se encontraban los jóvenes. Y según le narra a su hermano, que era un ministro en España y un hombre importante y de la cultura, se los encontró sublimados por la idea de la muerte. Le entregaron para sus familias cartas, y se despojaron de relojes, anillos y de todo lo que tenían como para dar un recuerdo a sus padres.
Es conveniente recordar que muchos de esos jóvenes eran hijos de notables españoles; ahí, en la esquina, estaba el comercio más importante de esta zona, que lo tenía el padre de uno de los jóvenes que iba a ser ejecutado: Alonso Álvarez de la Campa y Gamba.
Lo curioso es que el padre de Alonso, que era voluntario, había comprado los fusiles nuevos para el batallón que iba a fusilar a su propio hijo.
Llenos de odio y representando casi una lucha entre clases o castas, los voluntarios -en su mayoría muchos de ellos analfabetos- gente, como dijo Martí, “de España lo más bajo y lóbrego”; uno de ellos fue a la reja donde estaban prisioneros y le dijo al joven y elegante Alonso: “Alonso, Alonsito, ni los millones de tu padre te salvarán”, con lo cual queda claro que se había convertido en una tragedia de gran magnitud.
El padre de Alonso Álvarez apeló a su poder. Él y su esposa hicieron lo imposible, lo indecible. Escribió una dramática carta al rey de España, Amadeo I, clamando justicia contra el crimen que se había cometido, porque ya rondaba la noticia de que en el cementerio el panteón tenía unas rajaduras en el cristal, pero que eran viejas, y que nadie había profanado de verdad esa tumba.
Entonces surgió el escándalo gigantesco, que conmovió a la sociedad cubana.
El ejecutor de la sentencia, el teniente López de Ayala, le escribe a su hermano diciendo: “No murieron víctimas de su crimen. Murieron víctimas de sus alucinaciones políticas, lo cual crea en nosotros una duda.”
En otros casos, como el del poeta Plácido, por ejemplo, que fue tomado y acusado de lo que él consideraba una afrenta, su poema, que todos recordamos o debemos recordar, explica el estado de desesperación con que una persona joven es llevada a la muerte cuando no tiene responsabilidad en el hecho que se le acusa.
Sin embargo, Martí sostiene que con una pasmosa serenidad todos, uno tras otro, se acomodaron en los lugares donde iban a ser ejecutados, de dos en dos, y que se negaron rotundamente a pedir clemencia o a realizar un acto humillante para obtener el perdón o la conmutación de la pena.
Si esto es así, estamos ante la inocencia técnica de haber rayado la tumba de Gonzalo Castañón o de haberla roto, pero ante la culpabilidad superior de haber sido jóvenes cubanos que alentaban un sentimiento pro patria que el propio ejecutor reconoce.
Como en todo acontecimiento y a lo largo de la historia de Cuba, la solidaridad ha sido un hecho de suma importancia. Recordar hoy a Nicolás Estévanez, recordar a Federico Capdevila, al profesor Domingo Fernández Cuba, aun a los generales Clavijo y Benet y a todos aquellos que por sentimiento de dignidad o justicia se opusieron al crimen es un acto que ennoblece y engrandece el alma cubana. Pero siempre me he preguntado: ¿por qué entonces en 1936 casi mil jóvenes cubanos, encabezados por Pablo de la Torriente Brau, el gran periodista, joven, valiente , nacido en Puerto Rico, compañero de Mella y de Rubén, por qué fueron a luchar a España y por España? Fueron a luchar por una idea que identificaba a lo mejor y más valioso del pueblo español con el pueblo cubano, fueron a luchar por una causa que luego, en 1936, motivaría una lucha desesperaba que concluye 20 años antes del triunfo de la Revolución, en 1939, con la derrota de la República, con el exilio de miles y miles de refugiados y con la muerte, en esa batalla, de casi un millón de hombres, mujeres y niños de ambas partes.
La persecución contra los republicanos vencidos fue terrible. Y este es el único lugar del mundo, creo yo, que en este día se toca el Himno de la República porque Nicolás Estévanez fue republicano. Y fue ministro de la Primera República, no de la que se pierde en el 39, si no de la que se proclama en Madrid, en la Puerta del Sol, y cuyo clamor popular Martí sintió desde la pequeña habitación donde vivía en su exilio español.
Es por eso que este día se toca el himno porque el acto, además, fue organizado cuando se luchaba en España y cuando llegaban las primeras noticias a Cuba de la suerte y el destino de los jóvenes cubanos unidos al pueblo español. Por eso, cuando muere Pablo de la Torriente Brau, uno de los más grandes poetas de habla hispana, Miguel Hernández, despide su duelo diciéndole que llevaba el sol de España en los ojos y el de Cuba en los huesos.
Hoy rendimos homenaje a Nicolás Estébanez y rendimos homenaje temprano a los estudiantes, más o menos a la hora en que comenzó su martirio. Allá, desde muy temprano, está rodeado el monumento de las flores y las ofrendas. Hoy no es un día de pachanga, hoy es día para bajar la cabeza en el lugar que se convirtió por Cuba en un altar de sangre y recordar a los que sufrieron con dignidad aquel martirio, que ennoblece la profesión médica, la condición estudiantil y la condición cubana. Es también un día para recordar a los que fueron solidarios con ellos, a lo mejor y más representativo del pueblo español que es una de nuestras raíces caudales.
Recuerdo con ternura los años en que vine a este acto, cuando acababa de morir el Historiador, mi predecesor y maestro, y venía con su viuda, María Benítez. Entonces en el público no había tantos jóvenes. ¿Quiénes estaban con muchos jóvenes? Estaban los cubanos que regresaron de la Guerra Civil Española. Aquí estaban con Ramón Nicolau, que fue el encargado de buscar los voluntarios para España, todos aquellos ancianos que traían la condecoración de la República y la bandera tricolor de la República Española.
Todos fueron muriendo a lo largo de los años, destino común, entre ellos, Don Ramón de Lorenzo, que fielmente acompañaba a Emilio Roig, fundador además de la Sociedad de Amistad Cubano-Española.
En este día, al depositar estas flores de todos nosotros, rindamos este tributo. No olvidemos nunca, como no olvidó Martí, quien, estando exiliado en España, recibió la noticia de que algunos de los que habían sido al menos sus compañeros o los había conocido quizás, habían muerto aquella mañana en La Habana y recitó el ardoroso poema que todos conocemos: “Cadáveres amados los que un día, en sueños fuisteis de la Patria mía”.
Muchas gracias.

miércoles, 27 de noviembre de 2013

Los cinco hombres de acero




Compartir el IX Coloquio de Holguín en solidaridad con los 5 y contra el terrorismo con René González Sechwerert, el Héroe Nacional Cubano recientemente liberado y que hoy convoca multitudes en su patria; y asistir a la exposición de 15 acuarelas pintadas por Antonio Guerrero con anécdotas que aportan sus hermanos de prisión y en las que se describen las ignominiosas condiciones de carcelería que sufren incluso hoy; me lleva a la conclusión que se trata de personas de una consistencia especial.
Ellos -los 5, como los conoce el mundo- reflejan una mezcla metálica pocas veces vista: son hombres de acero, que tienen un corazón de oro puro. Porque son de acero han podido soportar 15 años en las condiciones más oprobiosas, en las ergástulas del Imperio.
Capturados a la mala por el FBI en septiembre de 1998, sometidos a tratos excepcionalmente crueles desde un inicio, sepultados en “El pozo” -una pequeña celda de “alta seguridad”- durante 17 meses sin contacto alguno con sus familiares directos ni su defensa jurídica; y procesados luego en un juicio inicuo que concluyó con sentencias extremadamente crueles; fue la primera etapa en la que ellos - aislados del mundo que desconocía su caso- debieron enfrentar con un coraje excepcional.
El juicio celebrado casi a los dos años de su captura, fue la ocasión para desenmascarar el accionar de un tinglado especialmente montado para la causa. A la vergüenza que mostraron en él los acusados, se sumó la infinita desvergüenza de sus acusadores, que recurrieron a todas las arbitrariedades para justificarse.
Se recuerda que en esa etapa, el gobierno de los Estados Unidos propuso a los acusados que se rindieran y testificaran contra su país a cambio de la libertad. Como los héroes de otras épocas, los 5 rechazaron la oferta y defendieron la causa de su vida y los intereses de su patria con firmeza ejemplar.
Aludiendo a lo ocurrido en el marco de este juicio, Fidel Castro diría con sobrado fundamento que el Proceso de La Florida “marcó una derrota moral sin precedentes, del Imperio”.
En el caso, que bien podría compararse a otros conocidos por la historia, como el que involucrara a Nicolás Sacco y Bartolomé Vanzetti en los años 20 del siglo pasado y el que comprometiera a Julius y Ethel Rosenberg a comienzo de los 50; los acusados mostraron un coraje y una dignidad a toda prueba. No solo defendieron su inocencia, sino que enarbolaron también el pensamiento de su pueblo como emblema de combate.
Casi al terminar el evento, los acusados dieron a conocer un documento de gran valor: un Mensaje dirigido al pueblo de los Estados Unido en el que describieron la verdadera naturaleza de sus acciones. En el documento aseguraron “No nos arrepentimos de lo que hicimos para defender a nuestro país”.
Es necesario que el mundo sepa que a lo largo de este proceso, como lo acota Antonio Guerrero, los acusados vivían virtualmente encadenados: “Cada vez que te sacaban de la celda de El Hueco por el motivo que fuera, te ponían esposas en muñecas y tobillos. Cada vez que nos trasladaban a la Sala de la Corte o a ver a nuestros abogados en aquel segundo hueco donde se pudieran las evidencias, en todo el trayecto íbamos encadenados y esposados” Pero en verdad, los 5 no defendieron solamente a su país. Protegieron incluso la vida de ciudadanos de los Estados Unidos, también amenazados por las Mafias Terroristas que operan en Miami bajo la protección de la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos y que ejecutan acciones que comprometen incluso a ciudadanos norteamericanos y a hombres y mujeres de otros continentes y países.
Y los 5 brindaron información de primer nivel que permitió preservar a personas de distintas nacionalidades protegiendo la seguridad y la vida de mucha gente inocente que pudo haber perecido por el accionar salvaje de terroristas que operan contra Cuba bajo el imperio de la más absoluta impunidad.
En su momento, y aludiendo a todo el Caso, René González diría ante un grupo de juristas cubanos, que hoy el caso "ya no es aquel que hace 15 años parecía que iba a ser sin costos".En la circunstancia, aludió al hecho que en el periodo del juicio, “ el mundo se encontraba en plena fiesta del neoliberalismo, América Latina no mostraba gobiernos de izquierda y Estados Unidos estaba en la cúspide de la euforia tras la desaparición de la Unión Soviética". En las condiciones de hoy, la realidad ha cambiado. Estados Unidos sufre los efectos catastrófico de una crisis que le roe incluso sus entrañas. Obama sabe -lo ha confesado hace apenas unas semanas- que fracasó completamente la política imperial impuesta contra Cuba hace más de cincuenta. Y se verá forado a cambiarla en un plazo corto. Lo que aún nos se atreve a admitir es que ese cambio deberá enfrentar dos retos esenciales: poner fin al bloqueo que sufre la Patria de Martí y de Fidel, y disponer la libertad de Fernando, Ramón, Antonio y Gerardo, los 5 héroes del Imperio que aún retiene.
Millones de hombres y mujeres, en todos los confines del planeta, se movilizan con esta bandera. Urge que ella se vea fortalecida y reforzada porque el tiempo pasa devorando vidas inocentes. Hombres de acero que actúan guiado por un corazón de oro, no pueden permanecer más tiempo en la prisiòn. Es deber de todos arrancarlos de las fauces de la fiera.

Gustavo Espinoza M.

martes, 26 de noviembre de 2013

Declaración desde Rosario del Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba y la Patria Grande




El Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba y todos los amigos de la Patria de José Martí nos hemos reunido en Rosario, la ciudad natal de Ernesto Che Guevara. Y anunciamos, con felicidad, al pueblo argentino y a los demás de la Patria Grande Latinoamericana, especialmente el cubano, que el XIII Encuentro Nacional de Solidaridad con Cuba ha sido un éxito. Y diremos brevemente por qué.
El jefe del imperio, Barack Obama, se reunió casi clandestinamente en Miami con los jefes de gusanería en la casa del presidente de la Fundación Nacional Cubano Americana, Mas Santos. En 40 minutos estuvieron pergeñando nuevas acciones de agresión contra Cuba, con algunas diferencias internas en este grupo de bandidos.

Cuba y la Patria Grande

MASCUBA en cambio se reunió durante dos días con todos los buenos amigos que tiene la isla de la Dignidad y constató que aumenta la corriente de amistad y solidaridad con ésta. La votación en la 68º Asamblea General de la ONU, donde el bloqueo criminal yanqui tuvo sólo dos votos contra 188 a favor de Cuba y 3 abstenciones, y donde Argentina votó muy bien, como lo viene haciendo hace años, fue otra comprobación de que Cuba tiene muchísimos amigos en el mundo. El imperio apenas tuvo el voto de Israel. Los números hablan con elocuencia.
Y no fue un Encuentro que sólo tuviera a Cuba y sus avances en los cambios económicos socialistas liderados por Raúl Castro en el centro de los sueños solidarios. La revolución bolivariana que hoy encabeza Nicolás Maduro en Venezuela, la revolución ciudadana de Rafael Correa en Ecuador, la nueva Bolivia plurinacional y multiétnica de Evo Morales, la Nicaragua sandinista de Daniel Ortega, etc., también estuvieron presentes en el amor de los delegados.
Por eso el XIII Encuentro Nacional de Solidaridad auspicia el ingreso de Argentina al ALBA, la Alianza Bolivariana de los pueblos de Nuestra América. Esta tiene sentido martiano, fidelista y chavista, palabras que horrorizan al imperio y los gobiernos más neoliberales de la región.

Peligro de restauración neoliberal

A diferencia del Encuentro de Córdoba en el 2012, constatamos la dolorosa pérdida que supuso la muerte del gran patriota latinoamericano, Hugo Chávez. Y cual si ese duro golpe hubiera sido una señal que aguardaban los sectores más reaccionarios alineados con Washington, hemos visto en 2013 que éstos quieren revertir el curso independentista de nuestra región. Desconocieron la victoria de Maduro en abril pasado y promovieron la violencia en Venezuela. Coordinaron la neoliberal Alianza del Pacífico, con los gobernantes de Chile, Perú, Colombia y México, más su patrón, EE UU.
Y no es ajena a esa movida continental la campaña de la derecha reaccionaria en Argentina que con el Frente Renovador y el PRO quieren recuperar el gobierno en 2015 para arrasar con las conquistas en derechos humanos, avances sociales y amistad con Cuba logrados en estos diez años.
¡No pasarán en Cuba los gusanos que apuestan al imperialismo y la SIP para desmerecer los logros sociales de la revolución inspirada por el comandante en jefe Fidel Castro!
¡No pasarán Clarín y los monopolios en Argentina para reimponer el injusto orden neoliberal de años anteriores que nos llevó a la ruina!
¡No pasarán Capriles, la Alianza del Pacífico y sus políticas antipopulares! La corriente principal que sigue fluyendo con más fuerza es la del ALBA, CELAC, Unasur y Mercosur

Patria, Humanidad y Paz

Rosario era la mejor cuna para nuestros puntos de vista nacionales, latinoamericanos e internacionalistas. Es la ciudad natal del Guerrillero Heroico, argentino de nacimiento, cubano militante por el socialismo y cuadro excepcional del internacionalismo revolucionario.
Coherente con ese ejemplo guevarista, el XIII Encuentro Nacional de Solidaridad prestó mucha atención a las tareas de la solidaridad con Cuba, como las protestas contra el bloqueo norteamericano y las campañas por la libertad de los Cinco cubanos presos en EE UU. Y registró el avance del repudio mundial a ese bloqueo injusto que data de 1962 y que provocó daños económicos directos por más de un billón (millón de millones) de dólares.
Asimismo hemos comprobado que cada vez son más los argentinos y los ciudadanos de diversos países que conforman comisiones por la libertad de los Cinco y emprenden acciones para que termine ese calvario comenzado en 1998. Hemos saludado un primer éxito cubano e internacional como es el regreso de René González a su patria. Desde la vera del Paraná le mandamos un saludo revolucionario al héroe de Cuba y nos comprometemos a no abandonar la lucha hasta que él y sus cuatro compañeros vuelvan libres a otear el mar desde el Malecón habanero, juntos a Fidel y Raúl, rodeados de sus afectos y de todo el pueblo, con la satisfacción del deber cumplido.
Lo viejo, si es bueno, nunca pasa de moda. Y eso ocurre con los ideales de José Martí de que “Patria es Humanidad”, que desecha los nacionalismos estrechos y los internacionalismos abstractos. Basados en Martí, estamos preocupados por los riesgos que corre la paz mundial por el triple torniquete del imperio: su crisis económica ininterrumpida, su alevoso espionaje antidemocrático y los planes de agresión a Siria y otros países que defienden su soberanía. Desde Rosario agitamos la bandera de la paz mundial y condenamos los planes agresivos del imperialismo, sean contra La Habana, Damasco, Teherán, Pyongyang o Caracas.
Internacionalismo no es contrario al patriotismo latinoamericano. De allí que alzamos nuevamente nuestras voces a favor de la devolución de Guantánamo a Cuba, de las islas Malvinas a Argentina, de la independencia de Puerto Rico, el cierre de todas las bases norteamericanas en la región y la base británica en Malvinas. Que se cierren en particular las bases yanquis en Colombia, como parte de una solución justa al conflicto armado en ese país (Cuba aporta como facilitadora de las negociaciones de paz). Reclamamos la pronta salida de Haití de las tropas de la Minustah tal como ha prometido el presidente de Uruguay y apoyamos a Ecuador para que Chevron pague su colosal deuda medioambiental de Lago Agrio.

Por una Multisectorial Argentina por Cuba

A lo largo de estos años se ha comprobado la importancia del MASCUBA en las tareas de solidaridad con Cuba. Ha demostrado ser la espina dorsal de esa solidaridad, con sus marchas a la embajada yanqui en Buenos Aires cada 12 de setiembre por la libertad de los 5, en sus actos y movilizaciones contra el bloqueo, que deben continuar contra las empresas como Google que bloquean a Cuba desde Argentina. MASCUBA ha hecho solicitudes a la Cancillería argentina por la cuestión del bloqueo, ha apoyado a los padres y familiares de estudiantes argentinos en Cuba, y a la inmensa labor solidaria de la Fundación UMMEP con Operación Milagro y Yo sí Puedo, etc.
Sobre este último aspecto, solicitamos al gobierno nacional y los gobiernos provinciales que consideren realizar un mayor aporte económico para el sostenimiento de estas misiones solidarias, que lo necesitan con urgencia.
A su vez la experiencia indica que la amistad con la isla socialista va mucho más allá de MASCUBA. Incluye a muchísimos argentinos progresistas y solidarios, los que han sido brigadistas, más los que han viajado como turistas, o han sido beneficiarios de las misiones cubanas en Argentina, o que participan de otros movimientos sociales, de Derechos Humanos, gremiales, culturales, religiosos y políticos como asunto principal. Están escasos de tiempo para dedicarse full time a la solidaridad pero pueden y quieren colaborar en ciertos temas o por determinados períodos, desde su ámbito específico.
Constatamos que los cauces de la solidaridad con la isla se han ensanchado respecto a años anteriores, reflejando la mayor politización y avance de las ideas populares en el país. Por eso el XIII Encuentro Nacional de Solidaridad retoma la idea expresada en 2012 en Córdoba de impulsar una amplia Multisectorial Argentina con Cuba en lo que queda de 2013 y sobre todo en 2014. Dirigentes, militantes, simpatizantes y amigos de Cuba y de la Patria Grande, están convocados a integrar esa Multisectorial, dentro de la cual MASCUBA seguirá cumpliendo su rol militante. ¡La lucha contra el bloqueo imperialista y por la liberación de los Cinco héroes requiere de la máxima unidad y amplitud posible!
Todo lo que hagamos, aún importante, no será suficiente para devolver a Cuba todo lo que hizo y hace por el porvenir de nuestros pueblos, en particular en estos últimos años en la recuperación de la visión de quienes la habían perdido y la salida de las tinieblas del analfabetismo.
Desde esta ciudad y ante el Monumento al Che, nos comprometemos a trabajar duro para que una amplia delegación argentina participe en octubre de 2014 del III Encuentro Mundial de Solidaridad con Cuba, en La Habana y pueda llevar un mayor bagaje de solidaridad, desde hoy hasta ese evento.
¡Cuba no está sola! ¡La isla de la Dignidad y sus reformas para un socialismo aún mejor están bañadas por un mar de solidaridad y admiración! ¡Si tocan a Cuba se levanta el mundo!

Rosario, 24 de noviembre de 2013

MOVIMIENTO ARGENTINO DE SOLIDARIDAD CON CUBA (MASCUBA)

lunes, 25 de noviembre de 2013

El pensamiento del Che en la Cuba actual




Les agradezco mucho a los organizadores de Dialogar, dialogar esta oportunidad de conversar acerca de un tema tan importante, a tan pocos días del II Congreso de la Asociación Hermanos Saíz. Esa reunión de jóvenes, precedida de amplios debates y acciones a lo largo del país, constituyó un evento ejemplar, porque trató los reales problemas del sector y de las prácticas culturales y sus implicaciones en la Cuba actual, con profundidad, claridad, proposiciones y espíritu revolucionario; sin autocensura y con valentía política. Fue un verdadero congreso, y una promesa necesaria.
El regreso del Che en Cuba comenzó en 1987, durante la campaña de rectificación, cuando Fidel lo contrapuso a la gran deformación que había sufrido el proceso revolucionario. Su pensamiento había desaparecido de la enseñanza y de los medios de comunicación desde inicios de los setenta, pero al fin comenzó a rescatarse y a ser conocido por nuevos cubanos durante aquellos años. Estaba claro que el Che hacía mucha falta. Sin embargo, después de la coyuntura compleja de la detención de la rectificación, de la gran crisis económica y de la calidad de la vida en Cuba, y de la pérdida de prestigio del socialismo a escala mundial, que sobrevinieron en la primera mitad de los años noventa, cuando el Che volvió físicamente, en 1997, la situación ya era otra.
Fidel y los revolucionarios consecuentes lo esgrimieron como un refuerzo para el enfrentamiento a una tercera pregunta general sobre el país, que ya comenzaba a percibirse. La primera, perentoria, había sido la de la sobrevivencia, que ocupó prácticamente todo el terreno en la angustiosa primera mitad de la década; la segunda pregunta era si la reproducción material de la existencia del país que se había ido logrando sería viable o no. El repertorio de variables favorables que poseía Cuba permitió que las políticas y las tácticas adoptadas aseguraran esa viabilidad a inicios de este siglo. La tercera interrogante no tenía carácter urgente, pero sí implicaciones trascendentales: cuál sería la naturaleza del régimen que emergería a partir del proceso de solución de las dos primeras. El Che reforzaba la posición de los queríamos que la respuesta fuera un socialismo más profundo, capaz de asumir su propia crítica y renovarse.
Pero ya estaban en marcha transformaciones sociales y de las conciencias dentro de la transición socialista cubana, paulatinas durante un largo período, que continúan hasta hoy. La ofensiva de Fidel al inicio del siglo XXI pretendió frenar desigualdades y reforzar al socialismo. Una insuficiencia grave, sin embargo, era el abandono, prácticamente, de la apelación a una divulgación que relacionara las medidas y las características socialistas de la mayor parte de la vida social con la necesidad del socialismo y con sus ideales, y de las prácticas y las discusiones de un pensamiento estructurado que operara como fundamentación del socialismo. En 2008 se publicaron los Apuntes críticos a la Economía Política del Che casi en secreto. Se ha ido nucleando un sector de estudiosos, incluidos jóvenes, y se ha avanzado en la publicación de su obra, pero sin que las ideas del Che se volvieran polémicas y participaran en los debates, que en realidad no eran alentados.
En estos últimos años se ha producido un positivo aumento de la politización, y también de la expresión de criterios diferentes dentro del cauce del socialismo, pero la socialización de un pensamiento que trate las cuestiones esenciales sigue sin ponerse a la orden del día. Mientras, se han emprendido transformaciones que pueden ser decisivas respecto a la existencia misma del socialismo cubano, al mismo tiempo que continúan tendencias que vienen del curso de las últimas dos décadas. Se han tomado y se toman medidas económicas muy importantes sin que haya discusión desde una u otra posición en economía política, porque no se invoca ninguna. Un pragmatismo descarnado es la regla, salpicado por algunas palabras que reiteran que lo que se hace es para el socialismo o en nombre de él. Existe un divorcio total entre las reflexiones críticas y las preocupaciones que expresan revolucionarios socialistas –entre los cuales hay cierto número de dirigentes– y numerosas informaciones y trabajos de opinión que aparecen en medios que pertenecen al Estado, ciegos ante lo que les parece negativo o inconveniente, y aferrados a tópicos que ya no son y a otros que nunca fueron.
¿Por qué los compañeros que convocan esta mesa escogen entonces al pensamiento del Che en la Cuba actual como tema? Porque tienen conciencia política del momento histórico en que vivimos y lo que se juega en él, y del papel que puede tener el Che si lo hacemos participar en la tremenda y ya abierta lucha cultural entre el capitalismo y el socialismo que caracteriza a la situación.
Del ejemplo que utilicé podría inferirse que la posición y la propuesta del Che que se han calificado como económicas serían su contribución lógica y mayor. Pero no creo que esa idea sea acertada, por dos razones. Ante todo, porque la concepción socialista del Che está opuesta a la separación abstracta de la dimensión económica de la sociedad que está en transición socialista, una operación que permitiría tratar a la “economía” en general como un campo separado y autónomo de la política, la ideología y la cultura, e incluso “ponerla a trabajar” para el socialismo. Esa separación es un recurso de comprensión y de argumentación de lo esencial del capitalismo, su funcionamiento y sus normas y valores. Che afirma que la economía debe ser gobernada por el poder popular revolucionario durante todo el proceso de transición socialista.
La segunda razón es consecuencia de la primera: las ideas y las propuestas del Che acerca de la dimensión económica son corolarios de su concepción teórica y política de la actividad revolucionaria creadora de socialismo. Trataré de sintetizar varios rasgos principales suyos:
a) la Economía, la Economía política y las políticas económicas sin apellidos son siempre formas de la economía del capitalismo, corresponden al complejo de teorías e ideologías de ese sistema;
b) la transición socialista es un poder político e ideológico revolucionario de orientación socialista-comunista, que tiende a unificar las dimensiones diferentes de la sociedad en cuanto a objetivos y voluntades, aunque todas ellas siguen teniendo sus características y sus especifidades, y se trabaja concretamente con cada una de ellas;
c) por consiguiente, el poder revolucionario es un puesto de mando sobre la economía, y es el conductor, de diferentes maneras, del conjunto de la sociedad;
d) precisamente por serlo, y para que ese poder no degenere en el poder de un grupo que termine cerrándole el paso al socialismo, está obligado a avanzar hacia su conversión en un verdadero poder popular, en el que los trabajadores y las mayorías conozcan las cuestiones fundamentales y participen de manera creciente en su control y su fiscalización, y en la elaboración misma de las decisiones y las políticas;
e) para todo el período de transición que va desde el triunfo revolucionario hasta el fin de las dominaciones y la creación de una sociedad nueva, muy diferente y muy superior a la capitalista, tienen que regir los despliegues y los productos de los factores subjetivos de la sociedad, y no las determinaciones llamadas objetivas. Guiarse por el predominio de los llamados “factores objetivos” conduce a la detención del proceso y su retroceso, en dos sentidos: el que procede de la reproducción “normal” de las condiciones de la vida social, que siempre consiste en la reproducción del orden de dominación vigente; y el que dimana del poder de un grupo que convierte su poder, sus intereses y su voluntad de dominio en cosas “objetivas” que no pueden cambiarse.
Ante el desafío crucial que se está configurando en Cuba entre el socialismo y el capitalismo, el Che puede ofrecernos su específica posición dentro de la revolución socialista, expresada y desarrollada en el conjunto de su pensamiento y en la batalla intelectual que libró para ganar a ella a los cubanos y que predominara frente a otra concepción diferente del socialismo que existe, y frente a las profundas insuficiencias de nuestra sociedad para consumar ese cambio. La centralidad de la política, sus férreas relaciones con la ética y el papel impulsor de esta cuando los factores subjetivos predominan, la conversión de la sociedad en una gigantesca escuela, son aspectos esenciales en la concepción del Che, que me limito a mencionar aquí.
Ernesto Che Guevara es el máximo pensador teórico de la posición dirigida por Fidel durante la primera etapa de la Revolución en el poder –la que va de 1959 a inicios de los años setenta–, y sigue siendo a mi juicio el máximo representante de la corriente socialista que puede hacer viable que Cuba siga siendo socialista.
Che tiene un lugar en la historia del pensamiento revolucionario cubano. No intentaré exponer mis criterios acerca de ese pensamiento, pero quiero al menos llamar la atención sobre la necesidad de no verlo como un bloque igual a sí mismo, sino en su realidad de producciones diversas, y en algunos casos enfrentadas entre si e influidas por condicionamientos que se iban modificando en el decursar histórico del país. Desde ese punto de partida, entiendo que el Che pertenece a la corriente radical, que ha tenido puntos en común y ha marcado una trayectoria que es preciso heredar.
Esos radicales se fueron por encima de las respuestas políticas que parecían posibles frente a los conflictos de su tiempo y su circunstancia, y las propuestas que hicieron también se fueron por encima de la reproducción esperable de la vida social.
Carlos Manuel de Céspedes forzó la aparición de la guerra como recurso revolucionario, fijó como condición para su cese la independencia y la soberanía completas del país, y abrió paso al abolicionismo revolucionario de la esclavitud como la solución necesaria de la mayor contradicción social de su siglo en Cuba. Echó así las bases políticas de una nación que tenía muy inciertas bases sociales, entre una rica y poderosa clase dominante que no aspiraba a ella y la explotación masiva de la esclavitud, las opresiones brutales y las divisiones de castas en que vivían las mayorías.
José Martí preconizó y desató una política revolucionaria muy superior a la que había conocido el país y la enfrentó sin vacilación a las variantes evolucionistas, que parecían más razonables para Cuba a fines del siglo XIX. Su guerra revolucionaria sería el único vehículo eficaz para eliminar el colonialismo español, pero al mismo tiempo la vía de una educación de masas que formara ciudadanos, capacitados mediante la actuación y unificados ideológicamente, para fundar y desarrollar una república democrática con justicia social, apta para aunar verdaderamente a los elementos tan disímiles del país. Esos cubanos de la república nueva martiana se habrían vuelto capaces también de enfrentar con posibilidades de éxito el expansionismo imperialista de Estados Unidos. La propuesta de Martí revolucionaba tanto a la política como a la reproducción esperable de la vida social, al ponerles como objetivos convertir en realidades lo que no había parecido ni siquiera posible.
Julio Antonio Mella partió de la lucha reformadora estudiantil en la primera república burguesa neocolonial, y comprendió pronto que la revolución socialista sería la condición para obtener la satisfacción de las demandas y las identidades de los grupos sociales. Se hizo entonces comunista, en el marco de la universalización política e ideológica que impulsaba la Internacional fundada en la Rusia Soviética. Pero logró entender que en los países colonizados o neocolonizados el anticapitalismo tendría que ser antimperialista. Y que la práctica revolucionaria comunista estaba obligada a ganarse la conducción en el curso de la revolución, y a ser ante todo cubana. Obró en consecuencia en su corta vida, y se convirtió en el iniciador del socialismo cubano. Es difícil encontrar tanto adelanto respecto a sus condicionamientos, y al mismo tiempo planteos políticos tan atinentes para cambiar mediante la praxis los límites de lo posible.
Antonio Guiteras consiguió echar a andar en Cuba la revolución del siglo XX, de la que Mella había sido el pionero, dentro de la lucha contra la dictadura de Machado y la gran rebelión del pueblo en 1933. Creó organizaciones políticas de lucha armada para tomar el poder e implantar el socialismo mediante la dictadura revolucionaria. Intentó que la educación social y política de masas avanzara a saltos mediante la praxis, impulsando una experiencia a escala nacional de una gestión de gobierno revolucionario antimperialista radical, con muchas medidas de justicia social en beneficio de las mayorías explotadas y oprimidas. Pretendió abrir el espacio y las formas para que se formara una conciencia social socialista de liberación nacional, y no tuvo temor de ejercer poder político para que esa conciencia se volviera realidad. El legado de Guiteras es indispensable para entender cómo fue posible pensar el socialismo cubano en la insurrección y el proceso revolucionario que triunfó en 1959.
Si exceptuamos el caso de Martí, las prácticas revolucionarias fueron lo dominante en la historia de las posiciones y propuestas de los radicales entre 1868 y 1959. Pero en su conjunto, ellos elaboraron un cuerpo de pensamiento que constituye una acumulación cultural de un valor inapreciable, que es necesario que rescatemos y asumamos conscientemente. Una de las características de todo orden posrevolucionario es la de devaluar, pasar al olvido o manipular las experiencias y las ideas radicales, con el fin de borrar su singularidad y su influencia.
El triunfo en 1959 de una guerra revolucionaria que constituyó al mismo tiempo una escuela política radical, dirigida por una organización férreamente unida, decidida y con vocación de poder, y a su cabeza Fidel, el líder político más descollante del siglo XX cubano, le permitió al país escoger la opción máxima posible: hacer una revolución socialista de liberación nacional que transformara a fondo las relaciones sociales y humanas y las instituciones. Pronto la nueva época exigió un formidable aumento de las capacidades intelectuales de la mayoría de las personas, y de la calidad del contenido y el papel del pensamiento social. La praxis era el motor, pero ella debía ser organizada y consciente. El aumento de capacidades y la formación política eran imprescindibles, porque, por primera vez en nuestra historia, los objetivos a alcanzar requerían una rigurosa intencionalidad, una conducción política y social cada vez más compleja, una distribución creciente del poder, un planeamiento eficaz, una crítica radical de la modernidad capitalista y del modelo socialista predominante y, al mismo tiempo, pensar la revolución que se hacía y elaborar intelectualmente las características de la nueva sociedad que se pretendía.
Entonces al joven héroe Ernesto Guevara, uno de los más destacados seguidores de Fidel y totalmente identificado con él en cuanto a las ideas, le tocó desempeñar el papel principal en la producción de un pensamiento social de la Revolución cubana y en las relaciones de este con las ideas socialistas del mundo de su tiempo.
El Che había tenido que aprender en muy poco tiempo cómo era Cuba y cómo participar eficazmente en su proceso revolucionario. A la vez, debió utilizar los instrumentos de pensamiento marxista que ya poseía sin someterse a la doctrina. Esa es una entre tantas lecciones que nos ha dejado. Cuando el periodista uruguayo Carlos María Gutiérrez le preguntó, en febrero de 1958, si él era marxista, el Che le respondió que había tenido que olvidar en la guerra todo lo que había aprendido antes. Ganó esa batalla consigo mismo y de inmediato puso su peso personal en ayudarnos a todos a pelear y ganar una batalla de ideas en el seno del proceso revolucionario, a favor de todas las liberaciones y por la creación de nuevas personas y una sociedad socialista.
Les sugiero que estudien aquella contienda de ideas. El Che que puede conocerse de ese modo es más humano y más grande, y a su escala también lo es la Revolución cubana de los años sesenta, esa maravilla enigmática para las nuevas generaciones que han sido privadas de su conocimiento, como si por un tiempo las cubanas y los cubanos en masa hubieran padecido una sublime locura.
Quiero compartir con ustedes una parte de lo que expresé en febrero, en la presentación de los libros del Che Apuntes críticos a la Economía Política y Retos de la transición socialista en Cuba (1961-1965), en la Feria del Libro.
El Che denuncia de manera categórica la apelación a tomar “como arma para luchar contra el capitalismo, las armas del capitalismo”. Las motivaciones de “la sociedad donde la filosofía es la lucha del hombre contra el hombre, de los grupos contra los grupos y la anarquía de la producción” no podrán ser despertadas y utilizadas eficazmente para servir a una sociedad basada en el poder socialista. Esta exige control riguroso y conciente, “la colaboración entre todos los participantes como miembros de una gran empresa (el conjunto de la economía), en vez de ser lobitos entre sí dentro de la construcción del socialismo”.
Opina que en vez de ir al fondo de los problemas, la práctica y el pensamiento de estos socialistas se dejan llevar a la seguridad aparente de acudir a lo ya probado. Las reformas pueden relucir como “descubrimientos” que remediarían la falta de motivaciones suficientes en los actores económicos y lograrían la subordinación de la producción para el consumo a las demandas de sus consumidores, relacionar la rentabilidad con la venta del producto, etcétera. Esos experimentos y ensayos de política económica son, sin embargo, remedos de lo que el capitalismo hace eficazmente, porque lo universaliza y porque corresponde a las relaciones fundamentales de su sistema. Existe una lógica que caracteriza a cada sociedad: si la olvidamos, pagaremos un precio muy caro.
Por otra parte, Che invita a no olvidar nunca la situación concreta de la cual ha partido Cuba en su transición socialista. No somos ilusos, advierte, estamos tratando de edificar efectivamente el socialismo “saliendo de una etapa semicolonial… de todos los vicios, de todas las taras que nos dejó el capitalismo, con la misma gente, con todos nosotros con mentalidad capitalista, hace unos años pensando siempre cuánto íbamos a ganar”. La debilidad que padece Cuba no debe atribuirse a la utilización de un sistema financiero determinado: “son debilidades de una economía que ha cambiado su composición, su característica”.
El Che insiste, incansable, en desbaratar la imputación que se hace a sus ideas de mantener un desprecio “idealista” por el interés material, un simplismo que busca devaluarlas y rehuir la discusión. Nadie en sus cabales desconoce la fuerza y el arraigo del interés material, instalado a lo largo de la historia de las sociedades de dominación y multiplicado y refuncionalizado por el capitalismo. La elección está entre utilizarlo llana y acríticamente –aunque se lamente que sea nocivo–, o utilizarlo como un mal necesario, sin depender de él. Ser creativo desde la situación concreta e inevitable, y organizar un proceso de erradicación paulatina de los comportamientos económicos egoístas e individualistas. Ir forjando otro mundo de actuaciones y valores, que pueda reunir diferentes estímulos, implantar la norma que en nombre del deber social reconoce o reprocha, al mismo tiempo que retribuye o no a partir del grado de cumplimiento, o el estímulo a la capacitación dado por su conversión en requisito para pasar a un nivel superior. Instrumentos como los citados, dice el Che, persiguen la toma de conciencia de tipo mecánico en el individuo; hay que perseguir, a la vez, la toma de conciencia de tipo dinámico, una de cuyas formas fundamentales es el trabajo voluntario.
La creación de otra realidad desde la existente, sin lo cual no hay revolución socialista, tiene que incluir el espíritu crítico, fomentar la independencia de los criterios y la capacidad de pensar y valorar con cabeza propia, y aprender a distinguir los caminos, sus implicaciones y sus resultados. Es impresionante la vitalidad y la hondura alcanzados por aquel análisis teórico que permitía, en medio de la tormenta de la Revolución, señalar los graves peligros de copiar mecánicamente y no ver las deficiencias del socialismo existente, y salirle al paso a la resignación a lo que existe, la rutina y el seguidismo. El Che aprendió –al mismo tiempo– a reflexionar sobre la circunstancia en curso, la actuación inmediata, los métodos y los fines mediatos, y a teorizar acerca de los asuntos fundamentales.
Al salir del Congo y verse obligado a esperar, Che se entrega a una tarea que constituye el inicio de una nueva fase de su obra. Siente la necesidad de llegar a conclusiones sobre el socialismo realmente existente, asunto crucial para todos en el mundo, y también de ofrecer una alternativa desde las ideas de los revolucionarios marxistas de los países que han sufrido o sufren el colonialismo y el neocolonialismo, que ahora quieren pelear por la liberación total de las naciones y de las personas, y por el avance de la revolución mundial. “Es un grito dado desde el subdesarrollo”, escribe en “La necesidad de este libro”, breve introducción a los Apuntes que contiene planteamientos trascendentales. Se refiere en ella a la obra monumental que dio origen al marxismo, las nuevas situaciones de la época imperialista, los aportes extraordinarios de Lenin y la detención ulterior del desarrollo de la teoría marxista. Enseguida expone las razones por las cuales hace la crítica de la Economía Política:
Creemos importante la tarea porque la investigación marxista en el campo de la economía está marchando por peligrosos derroteros. Al dogmatismo intransigente de la época de Stalin ha sucedido un pragmatismo inconsistente. Y, lo que es trágico, esto no se refiere sólo a un campo determinado de la ciencia; sucede en todos los aspectos de la vida de los pueblos socialistas, creando perturbaciones ya enormemente dañinas, pero cuyos resultados finales son incalculables (…) Nuestra tesis es que los cambios producidos a raíz de la NEP han calado tan hondo en la vida de la URSS que han marcado con su signo toda esta etapa. Y sus resultados son desalentadores: la superestructura capitalista fue influenciando cada vez en forma más marcada las relaciones de producción, y los conflictos provocados por la hibridación que significó la NEP se están resolviendo hoy a favor de la superestructura. Se está regresando al capitalismo.
Che espera serenamente el repudio a su posición y la acusación de anticomunismo y oportunismo, el rechazo de los que se sentirán heridos en su cariño y su lealtad, y también el sobresalto sincero de otros “ante este cúmulo de razones nuevas y diferentes”. Pero confía en que muchos podrán sentirse atraídos por este “intento de retomar la buena senda”. A ellos se dirige el libro, “y también a la multitud de estudiantes cubanos que tienen que pasar por el doloroso proceso de aprender ‘verdades eternas’ en las publicaciones que vienen, sobre todo, de la URSS, y observar como nuestra actitud y los repetidos planteamientos de nuestros dirigentes se dan de patadas con lo que leen en los textos.”
Un largo camino había recorrido Ernesto Guevara en una década. La revolución había sido su maestra. En la guerra y desde el poder revolucionario se desarrolló su estatura como combatiente, dirigente y pensador, y ahora él –como reclamara Lenin sesenta años antes– debía, en justo pago, enseñarle algo a la revolución. Y lo logró. La aventura socialista de un pequeño país aislado producía un pensamiento capaz de continuar el trabajo excepcional mediante el cual Carlos Marx había encontrado ideas capaces de subvertir el control de las ideas de la sociedad por la clase dominante.
Hasta aquí el fragmento de febrero, largo pero, según me parece, procedente. Para terminar en la cuerda de la pregunta implícita en el título del tema que nos convoca, ofrezco una síntesis de lo que estimo que puede darnos hoy el Che:
- un referente ético y político socialista sin igual, fortalecido por su consecuencia y su ejemplo imperecederos, y por su caída heroica;
- confianza en lo que sí es posible hacer y lograr para volverse superior a las circunstancias;
- un extraordinario instrumento teórico –conceptos, ideas, hipótesis, principios– y el método dialéctico marxista, que el Che ejerció sobre las realidades, los conflictos y los proyectos de Cuba y de América Latina y el llamado Tercer Mundo;
- una crítica marxista de las sociedades y las teorías del capitalismo y el socialismo;
- un cuerpo de pensamiento idóneo para realizar los análisis concretos que tanto necesitamos;
- una de las líneas principales con que contamos para el trabajo urgente de formación política, ideológica y cultural.

Fernando Martínez Heredia
Intervención en el espacio Dialogar, dialogar, de la Asociación Hermanos Saíz, en el Pabellón Cuba, el 23 de octubre de 2013.

sábado, 23 de noviembre de 2013

René González : “No nos dieron la garantía del debido proceso”




Cuando el sábado 23 y el domingo 24 se realice en Rosario (Argentina) el XIII Encuentro Nacional de Solidaridad con Cuba, por la Unidad Antiimperialista de América latina y el Caribe es seguro que se recordará que fue un general norteamericano, Edgar Atkenson, quien dijo que el país caribeño, situado a tan sólo 160 km de La Florida, debe tener ojos y oídos en Miami que la alerten ante una posible agresión. Atkenson fue jefe de la Oficina de Planificación de la Inteligencia norteamericana e instructor del Colegio de Inteligencia de la Defensa de los Estados Unidos. Si bien los cubanos no necesitaban de esa afirmación –citada por un testigo durante el juicio que en 1998 se hizo a cinco ciudadanos de la isla que llegaron a La Florida para detectar el armado de las más diversas agresiones y atentados contra su país–, no deja de ser significativa como muestra del espíritu belicista. Al mismo tiempo, da la razón a quienes hablan de los 50 años de permanentes ataques que provocaron 3478 muertes e incapacitaron a otras 2099 personas, según datos oficiales del Estado cubano.
En este contexto, René González, Ramón Labañino, Gerardo Hernández, Antonio Guerrero y Fernando González fueron designados por Cuba “para infiltrarnos en las redes terroristas, conseguir información y evitar nuevos ataques”, dijo a Página/12 el único liberado después de cumplir su condena, René González. Desde el Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, hasta Anmistía Internacional, dice González, dictaminaron que fue y es arbitraria la privación de la libertad de Los Cinco, acusados de conspirar contra los Estados Unidos. En 2005 desde el Grupo de la ONU se dijo que esa privación de libertad contraviene el artículo 14 de la Convención Internacional de Derechos Civiles y Políticos y, a pesar de que hay campañas internacionales, entre ellas la de varios premios Nobel –Adolfo Pérez Esquivel, Rigoberta Menchú y Günter Grass–, quedan 4 cubanos detenidos.
“La Justicia norteamericana es ciega y sorda”, se dice en La Habana, y René González, un hombre de 57 años, veterano de la guerra de Angola, piloto de profesión, explica que se habla de arbitrariedad porque desde todos los espacios se sostiene que “no tuvimos un juicio con las garantías del debido proceso. Ni siquiera se aceptó el principio elementalísimo de realizar las audiencias en una comunidad que no tuviera prejuicios y opinión adversa antes de escucharnos”. El piloto se convirtió en la voz de sus cuatro compañeros que permanecen detenidos y a quienes se les aplicaron penas que se “consideran desproporcionadas por la imputación que se nos hacía”. René González nació en Chicago “casi accidentalmente”, dice, ya que su padre que jugaba béisbol, se había ido de Cuba durante la dictadura de Fulgencio Batista. “Buscaba desarrollarse en las ligas mayores y mi madre, que tenía familiares norteamericanos, se había ido antes, pero a mis cinco años regresamos”, relata.
René, Ramón, Gerardo, Fernando y Antonio no se conocían entre sí antes de la misión. Hubo un abordaje individual hacia cada uno de ellos, cuenta el piloto González, y se les planteó la necesidad del país de enterarse a tiempo de los planes de los grupos anticastristas.
“Hay que aclarar que fue un trabajo totalmente voluntario al que podíamos decir que no… Me dijeron que lo pensara, que era peligroso, pero no tuve que hacerlo porque pasé mi niñez y el resto de mi vida viendo de manera constante cómo el terrorismo proveniente de Miami se ensañaba con la población cubana. Tenía 17 años cuando asistí al entierro de los pasajeros del avión de Cubana que fueron asesinados en 1976, al despegar de Barbados, por el terrorista Luis Posadas Carriles, entrenado por la CIA y quien todavía vive en libertad en Miami. Posadas Carriles dejó rastros de sangre no sólo en Cuba, sino en el continente sudamericano por su participación en la Operación Cóndor.”
–El día que partió de La Habana, el 8 de diciembre, había quedado con su mujer en ir al cine…
–Ya teníamos a Irmita, de seis años. Ese día fui a mi trabajo en el aeropuerto de San Nicolás de Bari, a cincuenta kilómetros de La Habana, donde trabajaba como instructor. Cuando encontré la oportunidad me fui con un avión y mientras el resto del personal se daba cuenta, ya estaba volando.
Hasta el pequeño departamento que ocupaban llegaron funcionarios del Ministerio del Interior con una afirmación que estremeció a su mujer Olga: “Su marido desertó, se llevó un avión y está en La Florida”, dijeron. De ahí en más todo fue desconcierto para la mujer y el resto de la familia, Roberto, el hermano del piloto, Irma su madre, sus amigos. Con el marco del desgarro familiar la voz de René González podía escucharse repetida, insistente, por Radio Martí, la emisora creada por el ex presidente Ronald Reagan como voz del anticastrismo más virulento. Desde Miami el piloto repetía que estaba harto de Cuba, de los racionamientos más elementales y de la vida en la isla. Tenía 38 años entonces y desde ese momento en que fue recibido como un héroe en Miami, no pasaría mucho tiempo hasta que lograra acercarse y “formar parte” de Hermanos al Rescate comandada por un acérrimo y activo anticastrista, José Basulto.
–¿Ya conocía a Basulto?
–Yo tenía recuerdos de mi niñez, cuando desde una lancha ametrallaron un hotel en La Habana y allí también estaba Basulto. Nosotros necesitábamos llegar a ellos, a los terroristas y si hubo algo que a mí me benefició fue haberme llevado el avión: eso me daba cierto estatus de celebridad, me hacía atractivo. Llegué a otros grupos como el Comando de Liberación Unidos y el PUND (Partido de la Unión Nacional Democrática), estos dos mezclas de terroristas y narcotraficantes hacia Cuba. Como era piloto, el mismo Basulto llegó a consultarme acerca de la manera de introducir explosivos y hasta de volar torres de electricidad en La Habana. Y además, en época de los balseros, tenían la esperanza de generar en el país un estado de rebelión. Con nuestro trabajo se pudieron desactivar muchas de estas acciones e indirectamente hubo una colaboración con el FBI en el tema del narcotráfico. En relación con la explosión de hoteles en La Habana, en el año 1997, llegamos a ubicar el paradero de Posadas Carriles.
Los Cinco se fueron de sus hogares en Cuba de manera parecida, aunque actuaron en distintos grupos de los que sostienen las principales actividades contra la isla y fueron detenidos el 12 de septiembre de 1998, después de que en Cuba –explica René González– “se reuniera el Ministerio del Interior con representantes del FBI a quienes se les entregó el detalle de los planes detectados para atentar contra la isla… En lugar de usar la información proporcionada por nuestro gobierno para detener a los terroristas, el FBI nos buscó y nos detuvo”.
El país entero pide por la libertad de Los Cinco. Pintadas, diseños diversos, en oficinas públicas, bares, hoteles y negocios. Los cubanos reclaman para que Los 5 Héroes regresen a casa. Un afiche muestra una mano que pide y la leyenda es categórica: “Obama… Give me five! Libertad para Los Cinco”. René González, este hombre alto, delgado, de inquietos ojos verdes y hablar tranquilo, asegura que mientras sus compañeros no estén en libertad “seguiremos siendo cinco encarcelados”.
–¿Ustedes tuvieron acceso a información clasificada?
–No, ni nos interesaba la información clasificada de EE.UU. Nosotros queríamos prevenir los actos terroristas. Es que el juicio fue un circo romano, violatorio de la 6ª. Enmienda y de cualquier legalidad. Así, después que la propia Corte de Apelaciones revocó el veredicto de culpabilidad porque consideró que en Miami no se hizo un juicio justo, la Corte de Apelaciones de Atlanta ratificó las condenas con algunas modificaciones en lo que consideró incorrecto: Antonio Guerrero, de una cadena perpetua más 10 años pasó a tener que cumplir 21 y 10 meses; en el caso de Fernando González, de 19 años pasó a 17; para Ramón Labañino, que tenía una cadena perpetua más 18 años, pasó a tener 30; se ratificaron las penas de 2 cadenas perpetuas más 15 años para Gerardo Hernández y los 15 años para mí. La Corte Suprema dijo que no revisará el caso. El reclamo es, entonces, para que el presidente Barack Obama los indulte.

Alicia Simeoni desde La Habana
Página 12

viernes, 22 de noviembre de 2013

Nuevo apoyo (simbólico) del mundo hacia Cuba




Como cada año desde 1992, la Asamblea General de la ONU aprobó este martes el rechazo al bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos sobre Cuba. La votación nuevamente fue apabullante: 188 votos a favor, dos en contra y tres abstenciones.

La escena se repite años tras año y cada vez con más contundencia. Este martes no fue la excepción. Como en los últimos 21 años, la inmensa mayoría de los Estados miembros de la ONU aprobaron una nueva resolución que demanda al gobierno estadounidense la inmediata eliminación de la agresiva política hacia el pueblo cubano que lleva más de medio siglo y que se calcula ha significado para la isla la pérdida de un billón 157 mil 327 millones de dólares.
En la votación de este año, Estados Unidos sólo tuvo el apoyo de Israel en los votos negativos, mientras que Palau -que en 2012 había votado en contra- se unió a las abstenciones de las Islas Marshall y Micronesia.
Desde 1992, cuando se aprobó por primera vez la resolución cubana contra el bloqueo, mucho se ha fortalecido el apoyo internacional. De los 59 votos a favor, tres en contra y 71 abstenciones registrados en aquella votación inicial, los resultados van demostrando el creciente consenso mundial al respecto: en los últimos siete años, más de 180 naciones apoyaron el reclamo.
El documento presentado por el canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, recoge de forma detallada, las afectaciones del bloqueo por sectores (salud, educación, turismo, cultura, inversión extranjera, etc.) y denuncia su carácter extraterritorial y su recrudecimiento en materia financiera por la actual administración estadounidense. El texto, además, contempla informaciones suministradas por unos 150 países, la Unión Europea, el Vaticano y diferentes organismos de la ONU que sustentan el impacto y fijan postura contra el cerco norteamericano.
Parrilla aseguró que “nuestra pequeña isla no es una amenaza para seguridad nacional de la superpotencia. Es un acto hostil y unilateral que debe cesar unilateralmente”.

Cinco décadas igual

Desde que la Revolución Cubana comenzó a dar sus primeros pasos a inicios de 1959, la hostilidad desde Washington no se hizo esperar. En noviembre de 1960 se implantaron las primeras medidas restrictivas en cuanto al servicio postal desde EEUU hacia Cuba; el 3 de enero de 1961 se anunció el rompimiento de las relaciones diplomáticas; el 31 de marzo se determinó que, por razones de interés nacional, se suprimía totalmente la cuota azucarera para Cuba; y el 4 de septiembre el Congreso estadounidense aprobó la Ley de Ayuda Externa, que prohibía todo tipo de asistencia al gobierno cubano.
Posteriormente fueron aplicadas otras medidas como la restricción del suministro de combustible a la Isla por las transnacionales norteamericanas, la paralización de plantas industriales y la prohibición de exportaciones a Cuba. Pero la fecha clave fue el 3 de febrero de 1962: ese día, el presidente John F. Kennedy decretó la Proclama Presidencial 3447 que impuso el bloqueo total sobre el comercio entre ambos países. Meses después, prohibió la ayuda a todo país que prestara asistencia a Cuba.
En virtud del bloqueo, entre otras restricciones, se estableció que Cuba no pueda recibir turismo norteamericano, no pueda utilizar el dólar en sus transacciones con el exterior, no tenga acceso a los créditos ni pueda realizar operaciones con instituciones financieras multilaterales y sus barcos y aeronaves no pueden tocar territorio norteamericano.
Con los años, más allá de alguna que otra flexibilización, se han sumado nuevas restricciones y el bloqueo fue aplicado y recrudecido por las siguientes diez administraciones norteamericanas. El 11 de septiembre de 2009, el presidente Barack Obama notificó a los Secretarios de Estado y del Tesoro que era de “interés nacional” mantener las sanciones económicas contra Cuba.
El Gobierno estadounidense suele argumentar que el bloqueo tiene carácter exclusivamente bilateral. Sin embargo, hay un largo listado de disposiciones extraterritoriales. Algunos ejemplos: la prohibición a empresas de terceros países exportar a EEUU cualquier producto que contenga alguna materia prima cubana; la prohibición a empresas de terceros países que vendan a Cuba bienes o servicios en los que se utilice tecnología estadounidense; la prohibición de la entrada a puertos de EEUU a buques que hayan transportado mercancías hacia o desde Cuba; la prohibición a bancos de terceros países abrir cuentas en dólares estadounidenses a cubanos y la prohibición a empresarios de terceros países llevar a cabo inversiones o negocios con Cuba.
No existe norma alguna del Derecho Internacional que justifique el bloqueo en tiempos de paz. Desde 1909, en la Conferencia Naval de Londres, quedó definido como principio del Derecho Internacional que el "bloqueo es un acto de guerra".

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Siembran árbol de la amistad en la Plaza del Che




Con la siembra de una caoba en la Plaza de la Revolución “Ernesto Che Guevara” de Santa Clara, cristalizó este martes una noble idea de integrantes de grupos de solidaridad con Cuba y con Los Cinco en Argentina, quienes desde hace años hicieron germinar el Proyecto Plantar un árbol en Cuba con tierra de “Los caminos del Che”.

El acto fue presidido por Kenia Serrano Puig, presidenta del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, otros dirigentes del ICAP y del Partido en Villa Clara, organizaciones de masas del territorio, combatientes, jóvenes de otras nacionalidades que se forman en universidades villaclareñas, así como estudiantes cubanos, pioneros, y pueblo en general. De manera especial, asistió Giustino Di Celmo, el padre de Fabio, joven italiano víctima de un acto terrorista en el Hotel Copacabana.
En áreas aledañas al Memorial donde reposan los restos del Guerrillero Heroico, se plantó la postura de la caoba, con tierra traída hasta el centro de la isla desde sitios donde Ernesto Guevara dejó sus huellas en su tierra natal: Caraguatay, Misiones; Alta Gracia, Córdoba; Rosario, Santa Fe y San Martín de los Andes en Neuquén, como símbolo de homenaje y perpetuidad de su legado.
El Capitán Fluvial Oscar Rubén Verón, inspirador del proyecto, significó cómo ha ido creciendo en Argentina la solidaridad con Cuba a través de varias acciones que han visibilizado más la realidad de la isla y el pensamiento guevariano.
Más adelante, manifestó que decir en esa nación austral el nombre de nuestra patria abre todas las puertas y la lucha por las nobles causas. “Cuba es una palabra mágica. Ese es nuestro compromiso, seguir expandiendo las ideas del Che, y de esta querida isla, por eso nos sentimos como en nuestra casa cada vez que venimos aquí, le decimos a los cubanos: cuenten con nosotros, nosotros contamos con ustedes”, expresó visiblemente emocionado.
A propósito de la siembra del árbol puntualizó: “el árbol es también el árbol de la solidaridad, el árbol de la revolución, el árbol de la unidad de este continente”, finalizó.
La actividad estuvo cargada de emociones, con la colocación de banderas argentinas y de los movimientos de amistad de la nación austral, así como gritos de solidaridad con Cuba y por la hermandad de ambas naciones.
Entretanto, se escucharon canciones, poemas y dedicatorias como las que regalaron Jesús Díaz Canel, integrante del Grupo provincial de solidaridad con Los Cinco y el pionero Carlos Alejandro Pérez, quienes expresaron todo el cariño hacia un hombre que se convirtió en paradigma del Siglo XXI.
Mayra Romero, Directora del Complejo Escultórico Che Guevara, en sus palabras también resaltó la significación de este momento, que marca un punto culminante en la amistad entre Cuba y Argentina y dijo que la siembra de este árbol nos convoca “a mantenernos más firmes y unidos en nuestros ideales de paz y de amor”.
Al concluir la actividad, Kenia Serrano declaró a esta CMHW que la siembra de la caoba tiene una significación especial pues la solidaridad sigue echando raíces, y simboliza la firmeza de nuestros pueblos de América Latina y el Caribe”.
Más adelante dijo: “le agradecemos al pueblo villaclareño por mantener el legado del Che y esa mística y amor que se respira en esta ciudad de Santa Clara”, sentenció finalmente la máxima dirigente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos.

Dalia Reyes Perera, de CMHW
12 Noviembre 2013

Grupo solidario de Argentina cumple programa en Cuba




Artemisa.- El grupo solidario de Argentina, Plantar un árbol en Cuba con tierra de los Caminos del Che, visitó el Mausoleo a los Mártires de Artemisa, como parte del programa que desarrollan en la Isla, del 29 de octubre al 18 de noviembre.
Honrar a los artemiseños participantes en el asalto al cuartel Moncada, en julio de 1953, es la motivación que nos hizo llegar hasta este solemne sitio, manifestó Luis Ernesto Rodríguez, uno de los 16 argentinos dirigentes de la Asociación de Trabajadores del Estado de Buenos Aires.
Los también miembros del comité argentino de solidaridad con Los Cinco expresaron el orgullo al conocer pasajes de la lucha cubana, lo cual les fortalece en el trabajo de socializar la realidad de este pueblo, aseguró Leticia Quagliaro, quien vive en Rosario, ciudad natal de Ernesto Guevara.
Armando Guerra, funcionario del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, refirió que los argentinos visitarán lugares de interés histórico y cultural, sostendrán intercambios con miembros de la Unión de Periodistas de Cuba, e integrantes de varios sindicatos, entre otras acciones.
El 12 de noviembre, en el Monumento del Che en Villa Clara, sembrarán un árbol de cedro alegórico a la amistad y hermandad entre los pueblos de Cuba y Argentina, con tierra de los lugares donde estuvo el Guerrillero Heroico en ese país suramericano, amplió Guerra.
Al frente del grupo Oscar Verón, líder del movimiento Navegando con el Che, explicó que en los tres últimos años recorrieron unos cinco mil kilómetros para recolectar tierra de los sitios argentinos donde vivió o trabajó Ernesto Guevara, homenaje a la obra de este hombre internacionalista, aseguró.
Manifestó que estuvieron en Rosario y en las localidades de Caraguatay, Alta Gracia y San Martín de los Andes, de donde traen parte del suelo que servirá para plantar ese árbol, símbolo de las relaciones pasadas, presentes y futuras de ambas naciones.
Mercedes Portillo en nombre de todos escribió en el libro de visitas el respeto que sienten por los cubanos y el compromiso revolucionario que tienen con nuestro pueblo.
Alberto Mas de Buenos Aires dijo que en el extranjero se silencia la verdad de Cuba y ellos comprobaron que nosotros mantenemos vivo al Che. Habló de las acciones que realizan por la libertad de los cinco las que fortalecerán y que espera que este sea el último coloquio por la libertad de ellos porque tienen que liberarlos, “es mucha la injusticia”.
Luis Ernesto Rodríguez enfatizó en el respeto al Che en Cuba, asegurando que Ernesto Guevara nació en Argentina y el Che en Cuba. La figura del Che y su imagen nos inspira para abrazar a al pueblo cubano, enfatizó.
La delegación recibió en el Mausoleo una explicación acerca del monumento, y todos manifestaron sentirse conmovidos por esta historia, las fotos, los objetos personales de los mártires, lo que representa la obra arquitectónica y las tumbas fuera del panteón de los asaltantes sobrevivientes ya
fallecidos.
Estos argentinos amigos de Cuba participarán en el IX Coloquio Internacional por la Liberación de Los Cinco y contra el Terrorismo, en Holguín, del 13 al 17 próximos.

(Con información de AIN y Ofelia Robainas)

Solidaridad mundial con Cuba más allá del Coloquio por los Cinco





Holguín este año no solo ha sido sede del Coloquio Internacional por la Liberación de los Cinco y contra el Terrorismo, sino que desde la Ciudad de los Parques amigos de la Isla provenientes de todas partes del mundo preparan el programa de actividades para el venidero año. En el 2014, el Tercer Encuentro Mundial de Solidaridad con Cuba es uno de los que se "cocina".

Argentinos solidarios con Cuba visitan Yaguajay




El grupo argentino Plantar un árbol en Cuba con tierra de los Caminos del Che visitó el municipio de Yaguajay donde rindió homenaje al Comandante Camilo Cienfuegos, en el complejo escultórico dedicado a su memoria, ocasión en la que se realizó la primera jornada argentina de homenaje al Héroe de Yaguajay, informó Raúl Cardoso Cabrera, delegado del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP) en Sancti Spíritus.
Los visitantes tienen un gran interés en la historia de Camilo, ya que fue un entrañable amigo del Che.
Para este viaje a Cuba, el grupo solidario trajo tierra de los diversos lugares donde estuvo el Che en Argentina, para con ese suelo plantar un árbol en áreas del complejo escultórico dedicado al Guerrillero Heroico en Santa Clara, simbólica acción de amistad entre los dos pueblos que se realizará el próximo día 12.
Como parte de su programa en Cuba, ellos acordaron también rendir tributo a Camilo, por lo cual viajaron hasta Yaguajay, donde el héroe de amplia sonrisa desarrolló una de sus tantas hazañas en la lucha del Ejército Rebelde contra la dictadura batistiana.
Igualmente el grupo argentino, activo en la campaña por la libertad de Los Cinco Héroes cubanos condenados injustamente en Estados Unidos, participará del 13 al 17 próximos en el IX Coloquio por la libertad de los Héroes y contra el Terrorismo.

EMBACUBA ARGENTINA

martes, 19 de noviembre de 2013

Declaración Final del IX Coloquio Internacional por la Liberación de los Cinco y contra el Terrorismo




La Declaración Final del IX Coloquio Internacional por la Liberación de los Cinco y contra el Terrorismo se convierte a partir de ahora en una estrategia para continuar la lucha hasta lograr la libertad de Gerardo, Ramón, Fernando y Antonio, que continúan injustamente encarcelados en los Estados Unidos.Los 272 delegados procedentes de 51 países que asistieron al evento desarrollado en Holguín, aprobaron un programa de actividades que contempla intensificar y apoyar desde sus respectivos países las acciones en Estados Unidos, y emplazaron al presidente de EE.UU, Barack Obama a hacer uso de las facultades que le confiere la Constitución y ponga en libertad a los antiterroristas cubanos.
El documento reclama el apoyo y divulgación de la realización en Europa de la Comisión Internacional de Investigación en el caso de los Cinco, que se llevará a cabo en Londres los días siete y ocho de marzo de 2014.
De igual forma convoca a apoyar la Tercera Jornada de denuncia y Solidaridad “5 días de Acciones por los Cinco en Washington DC, del cuatro al 11 de junio de 2014, acompañándola con acciones y manifestaciones frente a embajadas de Estados Unidos en todos los países.Llama también la declaración Final a alentar la participación en el III Encuentro Mundial de Solidaridad con Cuba y el X Coloquio, por realizarse en La Habana del 27 al 31 de octubre de 2014, convocado por el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (Icap), las organizaciones sociales cubanas y el capítulo cubano de la Red En defensa de la Humanidad.Proyecta también intensificar el trabajo con parlamentarios de todo el mundo para lograr un fuerte pronunciamiento destinado al Congreso de Estados Unidos y al presidente Obama, de manera especial, del Parlamento Europeo, de América Latina y África, así como alentar que sus parlamentarios visiten a los Cinco.La Declaración Final del IX Congreso convoca a continuar la campaña de acciones del día cinco de cada mes con envíos de cartas y mensajes al sitio web de la Casa Blanca, llamadas telefónicas, platones frente a embajadas y consulados de Estados Unidos, entre otras acciones.
La Declaración Final del IX Coloquio Internacional por la Liberación de los Cinco y contra el Terrorismo se convierte a partir de ahora en una estrategia para continuar la lucha hasta lograr la libertad de Gerardo, Ramón, Fernando y Antonio, que continúan injustamente encarcelados en los Estados Unidos. Foto tomada de Granma
Trabajar con los sindicalistas de todos los continentes, seguir utilizando y aumentar el uso de las redes sociales y medios alternativos. Convocar a la juventud del mundo a incorporarse a esta batalla e incrementar el apoyo de intelectuales, artistas y delegaciones deportivas, así como exigir al gobierno estadounidense la extradición del terrorista Luis Posada Carriles a la República Bolivariana de Venezuela, también figuran en los acuerdos recogidos en la Declaración Final.

Declaración Final del IX Coloquio de Holguín

Por nueve años consecutivos nos reunimos en Holguín, ciudad que desde el primer día ha servido de sede para que los amigos solidarios de distintos países del mundo encontremos un espacio común para debatir las acciones en esta batalla por la vida, la libertad de los Cinco patriotas cubanos, por la Paz y contra el terrorismo.
Este IX Coloquio se realiza en un contexto diferente a los anteriores. Tenemos la enorme alegría de contar con la presencia de René, después de haber cumplido hasta el último día su injusta condena y un año y medio de absurda libertad supervisada
Su presencia marca un hito decisivo en el impulso de la batalla por la libertad de los Cinco y nos compromete aún más para continuar luchando hasta poner fin a esta injusticia.
El 12 de septiembre se cumplieron 15 años de injusta cárcel, 15 años de violaciones, 15 años de venganza política que se extienden a través de las prisiones de Gerardo, Ramón, Antonio y Fernando a todo el pueblo cubano por la decisión soberana de ser libres e independientes; 15 años que evidencian la capacidad de resistencia de ellos y sus familias, a los cuales, los 272 delegados procedentes de 51 países en representación de todos los continentes, rendimos honor.
Entrar en el año de 16 de sus arrestos nos impone a todos el mayor esfuerzo para impedir que su regreso a la Patria sea por cumplimiento de condena, en el caso de Fernando los primeros meses del 2014, aunque su condena se cumple el 27 de febrero, tendrá que pasar a una prisión de inmigración hasta ser deportado a su patria. Antonio en el 2017, pero al ser ciudadano norteamericano le aplicaron 5 años más de libertad supervisada. Ramón en el 2024 y Gerardo, el más castigado de todos, sin fecha de regreso ya que pesa sobre él la más brutal de las condenas. El gobierno de los EEUU pretende que Gerardo muera en prisión.
Los recursos de apelación extraordinaria o Habeas Corpus presentados por la defensa continúan sin respuesta. El escandaloso pago por parte del gobierno de EEUU a periodistas para que crearan una atmósfera de culpabilidad antes y durante el juicio, sigue sin respuesta, y continúan ocultas por 17 años las imágenes satelitales que demuestran que el derribo de las avionetas se produjo en aguas cubanas. Vive en Miami en total impunidad el terrorista internacional Luis Posada Carriles, cuya extradición Venezuela continúa sin efectuarse desde el 2005.
Ante tanta impunidad, y tantos años de cárcel injusta, con honda preocupación nos preguntamos ¿Cómo confiar en un sistema de justicia que castiga a los inocentes y da total impunidad a los criminales? Tristemente el caso de los Cinco demuestra que el sistema de justicia en EEUU ha sido secuestrado por un pequeño grupo de fascistas mafiosos, que supeditan a sus odios e intereses mezquinos la política exterior de EEUU.
Volvemos a preguntarnos, dado el paso inexorable del tiempo ¿Cuáles han sido y serán las secuelas para la salud física y psíquica de los Cinco y sus familias, luego de tantos años de injusto e ilegal castigo?
El ex Fiscal General de EEUU, Ramsey Clark, dijo:
“No se podrá ignorar el mal que se ha hecho con esta arbitraria decisión. El mal a estas personas hoy detenidas. El mal a sus familias y el mal a las relaciones entre Estados Unidos y Cuba”(…) “Algún día en Estados Unidos tendremos que dar cuenta por este juicio errado”.
Tomamos las palabras de Ramsey Clark para que el daño que ya se ha hecho no se perpetúe en el tiempo. Multiplicar las acciones del movimiento de solidaridad en torno a los Cinco, coordinarlas y articularlas en unidad de acción son los ejes principales para aprovechar la enorme capacidad de acción de los comités que en el mundo trabajan por su libertad.
Los 272 delegados de 51 países asistentes al IX Coloquio Internacional por la Libertad de los Cinco y Contra el Terrorismo, convocamos a:

1) Intensificar y apoyar desde nuestros países las acciones en EE.UU, con la ayuda económica de todas las organizaciones de solidaridad del mundo, centrando la demanda al Presidente Barack Obama, para que, en uso de las facultades que le confiere la Constitución de su país, libere a los Cinco y los devuelva a Cuba sin condicionamiento alguno.

2) Apoyar y divulgar información sobre la realización en Europa de la Comisión Internacional de Investigación en el caso de los Cinco, que se llevará a cabo en Londres el 7 y 8 de marzo de 2014 y contará con la presencia de importantes personalidades.

3) Apoyar la III Jornada de Denuncia y Solidaridad “5 días de Acciones por los Cinco” en Washington DC, del 4 al 11 de junio de 2014, acompañando la misma con acciones y manifestaciones frente a las embajadas de EEUU en todos los países.

4) Alentar la participación masiva al III Encuentro Mundial de Solidaridad con Cuba y el X Coloquio, a realizarse en La Habana del 27 al 31 de octubre de 2014 convocado por el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, las organizaciones sociales cubanas, y el capítulo cubano de la Red En Defensa de la Humanidad, donde continuaremos demandando la libertad inmediata de nuestras Cinco hermanos y el levantamiento del genocida bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba por el gobierno de los EEUU.

5) Intensificar el trabajo con parlamentarios de todo el mundo para lograr un fuerte pronunciamiento destinado al Congreso de EEUU y al Presidente Obama, de manera especial, del Parlamento Europeo, de América Latina y África, así como alentar que sus parlamentarios visiten a los Cinco.

6) Continuar la campaña de acciones del día 5 de cada mes con envíos de cartas y de mensajes al sitio web de la Casa Blanca, llamadas telefónicas, plantones frente a las Embajadas y Consulados de EEUU, entre otras acciones. Es importante sumar a personalidades del mundo para que desde cada país una personalidad escriba a Obama el 5 de cada mes y la haga pública.

7) Solicitar a los religiosos de diferentes congregaciones, credos y cultos del mundo que interactúen con sus pares en EEUU y Canadá a favor de los Cinco, y soliciten al presidente Barack Obama una solución humanitaria en este caso.

8) Trabajar con los sindicalistas de todos los continentes para que interactúen con sus homólogos en EEUU para concertar acciones en la lucha por la liberación de los Cinco.

9) Seguir utilizando y aumentar el uso de las redes sociales como Facebook, Twitter, YouTube, Blogs y medios alternativos para insistir en la denuncia y divulgación del caso.

10) Exponer la conducta criminal del gobierno de EEUU en haber corrompido la justicia en Miami con pagos secretos a periodistas antes y durante el juicio de los cinco, así como utilizar esta información para que juristas y periodistas en EEUU y en el mundo exijan al gobierno de EEUU la inmediata liberación de los cinco.

11) Convocar a la juventud del mundo a la realización de Conciertos, foros educativos sobre los cinco en escuelas y universidades, maratones, y otras acciones en defensa de esta noble causa y a la OCLAE y la Federación Mundial de Juventudes Democráticas, así como las redes macrorregionales que inserten una agenda de iniciativas propias en los foros internacionales en los que participen, de manera especial en la edición del XVIII Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes a realizarse en diciembre en Quito, Ecuador. Hacer énfasis en los jóvenes y estudiantes norteamericanos.

12) Incrementar el apoyo de intelectuales, artistas y delegaciones deportivas participantes en eventos nacionales e internacionales con proyecciones divulgativas, en especial la elaboración de materiales audiovisuales sobre los Cinco, cuyos mensajes sean compartidos y multiplicados a través de las redes sociales y otros canales de información.

13) Exigir al gobierno de EEUU la extradición del terrorista Luis Posada Carriles a la República Bolivariana de Venezuela, cuyo gobierno lo reclama por violaciones a los Derechos Humanos y a las leyes en ese país.

Queridos amigos:
Quince años de injusta cárcel a Cinco inocentes compromete su derecho a la vida, la soberanía y la dignidad por la que luchan todos nuestros pueblos. No es solo a Cuba a la que pretenden castigar junto a los Cinco en sus prisiones, es a cada uno de nosotros.
Por Gerardo, Ramón, Antonio y Fernando, por el sacrificio de René, porque los Cinco continúan siendo los Cinco, trabajemos sin descanso para exigir:

¡Libertad Incondicional, Ahora!

Holguín 17 de noviembre de 2013

El Che en Bolivia




El Che en Bolivia. María del Carmen Ariet (Centro Che - Cuba), Antonio Peredo y Osvaldo Peredo (hermanos de Inti y Coco Peredo, integrantes del ejército que comandó el Che en Bolivia. Entrevistas realizadas por La Pastera, museo del Che en San Martín de los Andes (Argentina), Buenos Aires (Argentina) y La Paz (Bolivia). 2009-2011

Hermanados por el Che




Delegación de la Asociación Trabajadores del Estado integrada, entre otros dirigentes, por el director de La Pastera, Darío Fuentes, visitaron Cuba. La Pastera presentó en el Memorial de Santa Clara y en el Centro Che, la última producción multimedia sobre el diario del Che en Bolivia. Fuentes también participó además de la FIT Cuba, integrando la delegación oficial argentina, con el programa "Los Caminos del Che", junto a los museos y espacios de homenaje en la Argentina y Juan Martín Guevara, hermano del Che. Año 2012.

Ellos lucharon junto al Che






Entrevistas a Harry Villegas, Victor Dreke. Alberto Castellanos, Luis Monteagudo y Oscar Fernández Mell. La Pastera museo del Che entrevisto a estas cinco combatientes que lucharon junto al Che Guevara en Cuba, El Congo y Bolivia. 2008-2010